A lo largo de nuestras vidas digerimos más de 25 toneladas de alimentos, además de los fármacos que se consumen por vía oral, siendo el tracto gastrointestinal el primer contacto del cuerpo con los medicamentos.
La Barrera y la Flora Intestinal.
El intestino delgado tiene doble función: la digestión y absorción de nutrientes y actuar como barrera mucosa selectiva frente a los microorganismos y las macromoléculas.
La barrera intestinal puede verse alterada por diversos mecanismo, como por ejemplo: infecciones intestinales, alteraciones de la flora intestinal, consumo de alimentos alergénicos o de compuestos tóxicos, alcohol, medicamentos (antiinflamatorios, antibióticos...), quimioterapia, radioterapia...
Un incremento de la permeabilidad intestinal supone un aumento del paso de sustancias tóxicas a la sangre.
La enfermedad de Crohn, la celiaquía, la artritis reumatoide, la espondilitis anquilosante, la diabetes tipo 1, la esclerosis múltiple, la dermatitis crónica, el asma y diversos tipos de cánceres pueden deberse a una permeabilidad intestinal aumentada.
La alteración de la flora puede tener efectos nocivos importantes para la salud. Podemos llegar a alterar nuestra flora intestinal después de un tratamiento con antibióticos, a causa de una dieta desequilibrada, o pasando por una infección crónica o aguada como por ejemplo una candidiasis mantenida en el tiempo.
"La muerte empieza en el colón"
Bernard Jense
Evitar el Estreñimiento.
Uno de los trastornos intestinales más comunes es el estreñimiento. Para saber si lo padecemos debemos contar la frecuencia de las deposiciones. El criterio médico más aceptado dice que el rango de evacuaciones de un sujeto por semana va de entre 3 y 20, considerándose como estreñida la persona que tenga un frecuencia defecatoria igual o menor a 3 deposiciones por semana.
SENCILLOS HÁBITOS PARA UNA DESINTOXICACIÓN INTESTINAL.
1. FIBRA DIETÉTICA: La ingesta diaria de suficiente fibra es muy importante para apoyar nuestro transito intestinal. Existen dos tipo de fibras dietéticas: las solubles (se disuelven en el agua) que las encontramos en las legumbres, la avena, las semillas y algunas frutas y verduras. Las insolubles (no se disuelven en el agua) como puede ser las semillas de lino, el salvado de trigo o de avena.
2. PROBIÓTICOS: El consumo de probióticos nos va a ayudar a poblar la flora intestinal. Son capaces de generar compuestos con actividad antioxidante, neutralizando así moléculas tóxicas. Nos ayudan a expulsar bacterias, enzimas bacterianas y moléculas procarcinogénicas. Se recomienda tomar probióticos después de un tratamiento con antiinflamatorios y antibióticos. Y en caso de diarreas producidas por virus estomacales o alteraciones alimenticias por intolerancias o alergias.
3. ALOE VERA: El gel de aloe tiene un potente valor en la recuperación de la mucosa gástrica, así como un buen papel como laxante y favorecedor del transito intestinal. Puede encontrarse en comprimidos o zumo.
4. ACEITE DE ORÉGANO: Es un antimicrobiano de amplio espectro y un potente antifúngico. Imprescindible en el tratamiento para eliminar la Candida.
5. AJO: Es un poderoso antibacteriano, antivírico y antifúngico.
6. HIDROTERAPIA DE COLON.
7. A TENER EN CUENTA: El sello de oro, la clorofila, el carbón vegetal, la arcilla bentonita, el sulfato de magnesio.
OPTIMIZAR LOS SISTEMAS DE DESINTOXICACIÓN CON EL ADECUADO APOYO NUTRICIONAL Y EL EMPLEO DE FITOQUÍMICOS Y PLANTAS INDUCTORAS DE LAS VÍAS DE ELIMINACIÓN ES, SIN LUGAR A DUDAS, EL CAMINO PARA LA SALUD.
En Espacio Natura Herbolario colaboran varios expertos en Asesoramiento Dietético y Nutrición, desde el profesional tradicional, pasando por el Terapeuta Ayurveda o Terapeuta de Medicina Tradicional China.
La información presentada en este artículo tienes fines informativos y orientativos. Siempre se debe consultar con un profesional de la salud.
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